¿Educación digna para un jaguar?
Conmoción por injusticia académica nos obliga a hacernos esta pregunta
Siempre han existido problemáticas inquietantes dentro del plantel: los precios altísimos de las cafeterías, la higiene en la comida, entre otras. Pero hay un tema delicado a tratar: los problemas con varios de los docentes. Académicamente, muchísimos alumnos se han visto afectados en sus calificaciones por alguno de sus profesores.
¿Realmente todos los profesores de la Lázaro Cárdenas están preparados para impartir clases? ¿Por qué el sistema no actúa bajo las demandas que impone el cuerpo estudiantil ante injusticias que afectan su educación?
Desde que inició el ciclo escolar se han presentado innumerables quejas por parte de grupos enteros, acusando de calificaciones injustas o actitudes prepotentes de los maestros. Muchos de los problemas surgen porque no respetan o no proporcionan los criterios de evaluación al principio del semestre, por lo que tienen cabida a modificaciones inesperadas, afectando así el resultado de todo el parcial.
La solución a este problema, que supongo nos ha perjudicado a bastantes, debería ser la revisión de cada uno de los docentes en cuanto a la forma de calificar a los alumnos; pero, más allá de esto, debería tener que ver con las aptitudes que presentan para tratar con las personas en general. Especialmente, con aquellos que somos, al final del día, el futuro del país. ¿Qué clase de ejemplo nos están dando?
No están calificando mi conocimiento y habilidades. Califican el color de tinta que utilizo en mi ensayo de 10 páginas. Califican el tipo de folder en el que guardé mi portafolio de 42 actividades escritas a mano. Califican la comparación de caligrafía entre mi compañero y yo.
-Por Daniela Angulo.

Caricatura periodística por Noelia Esparza.